Descubrir lo descubierto

Qué paradoja, y muy banal también si se espera que les hable de un tema trascendente, de coyuntura nacional, no, esos me tienen un poco cansado y vendrán después.

La paradoja a la que me refiero es sobre el tema que les expongo, sobre cómo uno descubre y va descubriendo la música en general, pasando a lo particular cuando descubres a un solista o grupo en específico en determinado momento de tu vida. Es algo tan personal, tan íntimo y vivencial que cada uno lo vive a su manera y según sus conceptos y claro, sus prejuicios.

Y hablo de paradoja porque, por lo menos en mi caso, yo no descubro o escucho por primera vez a los solitas o grupos cuando estos recién han sacado del horno sus últimas producciones o incluso cuando han debutado discográficamente. Suelo escuchar a "esa" música o bandas cuando se me da la gana, cuando me tinca, cuando ya han sido bastamente criticados por los medios e incluso por mis amigos "musicólogos"... y no necesariamente habré hecho mucho caso a esas "críticas" antojadisas o sencillamente prejuicios de estilo, según el gusto del consumidor.

Quizás, patudamente me da por escuchar a cierta banda cuando ya va en su cuarto o quinto disco, o más aún, cuando ya han osado posar sus narices en tierra nacional, y eso sí que es mucho decir... Bueno, el punto es que cuando logró conseguirme un disco del grupito que me ha venido cosquilleando los últimos meses y años, sencillamente me conecto con los audífonos y escucho...escucho y escucho, a lo Coco Legrand, ¿a qué se dedicas este weon? Bueno, ese weon... escucha, lo prefiero antes del weon que "fuma".

Bueno, todos los comentarios y prejuicios que he escuchado sobre el artista en cuestión me los meto al bolsillo y comienzo a escuchar, escuchar, juzgar y encasillar, qué atrevimiento dirán muchos, pero seamos sinceros, todos encasillamos, según el "background" musical que tengamos, asociamos a... hijos de... copiones de... los menos son los innovadores, los vanguardistas... Y claro, esa maldita-exquisita sensación de escuchar un disco entero por primera vez es lo que rescato, esos minutos únicos, es como desvirginizar a tus oídos de cierta música, de ciertos artistas, nunca más serán los mismos, porque cuando escuches esa voz, esos acordes y esas atmósferas, uno irremediablemente asociará al instante y sabrá a quién es el que irrumpe en sus tímpanos.

Por lo mismo, JAMÁS olvidaré la primera vez que "descubrí" y descartuché mis oídos, y mis sentidos, claro, del Abbey Road de los Beatles por ejemplo o de las "Alturas de Macchu Picchu" de Los Jaivas o el "Mellon Collie" de los Pumpkins o el "Unplugged" de Alice in Chains... y tantos cientos más, no importa el año que vine a escucharlos por vez primera, sino que lo que vale es cúanto sentí, disfruté o me decepcioné en el momento. Porque repito, esos momentos son únicos y SOLO SE DESCUBRE, UNA SOLA VEZ.